A diferencia de otros soldados esqueléticos criados de entre los muertos, Clavian y sus hermanos con tonos carmesí renacen de la magia llena de sangre. La brujería sucia utilizada para regenerar a estos demonios escarlatas también les otorga fuerza aumentada y la capacidad de eliminar y blandir sus propios huesos como armas, solo para volver a crecerlos una y otra vez. La magia que atraviesa los huesos de Clavian hace que incluso su más mínimo toque letalmente venenoso.